
Ryan Walter, un emprendedor desde temprana edad, dio vida a Polielectric a los 19 años con una inversión inicial de tan solo 200 dólares. Su experiencia previa, a los 14 años, convirtiendo un auto en mal estado en un Buggy para la playa, le proporcionó habilidades y perspectivas valiosas en el mundo del emprendimiento.
La génesis de Polielectric se basó en la fabricación de aisladores eléctricos sostenibles a partir del reciclado de silobolsas, originarias del sudeste de la provincia de Buenos Aires. Inicialmente, la idea de utilizar tapitas de botella resultó funcional pero no escalable ni sostenible a largo plazo. Sin embargo, gracias a la sugerencia de un conocido, Ryan exploró el potencial de las silobolsas como materia prima, lo que marcó un cambio crucial en su enfoque empresarial.
Con una mentalidad de startup y el compromiso de abordar la problemática global de los desechos plásticos, Polielectric adoptó un enfoque sostenible y eficiente en su cadena de producción. En lugar de pasar por diversas etapas de trituración, lavado y secado, optaron por transformar el plástico en cartuchos cilíndricos que se introducen directamente en la inyectora, reduciendo así el uso del agua y evitando desperdicios.
Ryan destaca la durabilidad y flexibilidad del plástico utilizado, proveniente de silobolsas, con una vida útil de más de 40 años. Además, la empresa ofrece servicios de retiro de residuos sin costo para los productores, fortaleciendo su compromiso con la sostenibilidad ambiental.
Polielectric aspira a abordar el problema a una escala mayor, estimando que solo en Argentina hay alrededor de 55,000 toneladas de plástico de silobolsas desechadas. Con la posibilidad de inversiones externas, buscan alcanzar una significativa porción del mercado, proyectando sacar unas 100,000 toneladas de plástico de los campos de todo el mundo en menos de cinco años.
En resumen, la historia de Polielectric y Ryan Walter destaca la capacidad de adaptación, la innovación sostenible y el impacto global en el emprendedurismo, sirviendo como un inspirador ejemplo para aquellos que buscan combinar el éxito empresarial con la responsabilidad ambiental.